Red clandestina de encuentros motociclistas desata alarma en Cancún
Vecinos denuncian reuniones clandestinas de motociclistas en una gasolinera de Cancún y señalan omisión y posible corrupción policial.
Ciudadanos de Cancún han intensificado sus reclamos ante lo que consideran incapacidad de las autoridades del Ayuntamiento de Benito Juárez frente a reuniones clandestinas de motociclistas que, aseguran, se han convertido en una amenaza cotidiana.

Diversos testimonios vecinales describen un escenario recurrente: consumo de alcohol y narcóticos, ruido excesivo, maniobras riesgosas y ausencia total de medidas de seguridad. De acuerdo con residentes de la zona, cerca de un centenar de jóvenes —algunos posiblemente menores de edad— y adultos se congregan de manera habitual en la gasolinera PEMEX situada en la intersección de la Avenida José López Portillo y la calle 69, en la Supermanzana 61, así como obstruyendo la la vía pública en la calle 69. Los vecinos afirman que el aroma a estupefacientes, el estruendo constante de motores y música por encima de la NOM-081-SEMARNAT para zonas residenciales y el riesgo de una explosión por un accidente en un sitio con combustible son factores que los mantienen en alerta permanente.
Los asistentes al encuentro improvisado suelen realizar aceleraciones extremas y acrobacias temerarias directamente sobre el suelo de la gasolinera y en la vía pública. Según los reportes ciudadanos, estas actividades se desarrollan por lapsos de al menos una hora, por lo general entre las 22:00 y las 23:00 horas. La frecuencia es variable: algunas veces ocurre entre semana, otras en fines de semana, y en múltiples ocasiones sin patrón predecible. Para adultos mayores y trabajadores que madrugan, el “espectáculo clandestino” se ha vuelto un motivo de cansancio, molestia y temor, ante lo que califican como producto de una total ausencia de las autoridades locales.

La pregunta que más se repite entre los habitantes es: ¿dónde está la policía municipal? Varios residentes, cuyas identidades se mantendrán en anonimato por su seguridad, aseguran haber visto a elementos policiacos conversando con individuos que presuntamente organizan estas reuniones, así como con personal de la Gasolinera ES14351. Esta interacción, afirman, ha generado sospechas de corrupción, acuerdos informales y permisividad institucional. Señalan que, tras estos intercambios, los oficiales suelen retirarse, dejando el camino libre para que el evento clandestino continúe sin sanción.
Cancún sigue expandiéndose aceleradamente, y algunos vecinos creen que esta problemática podría no haber llegado todavía al conocimiento de la alcaldesa Ana Patricia Peralta de la Peña. “Y vamos a darle el beneficio de la duda”, expresan los vecinos sabedores del efectivo trabajo de la alcaldesa, al tiempo que reclaman soluciones antes de que la situación escale. Las denuncias incluso han alcanzado medios nacionales, como la redacción de PHmx Noticias, lo que demuestra la urgencia de atender una demanda ciudadana sostenida y respaldada por contribuyentes que exigen seguridad en su propia comunidad.

A petición de los propios vecinos, el llamado también se dirige a la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama. “Estamos seguros que nuestra gobernadora no nos va abandonar en este tema, apóyenos a que llegue este caso a su escritorio y nos ayude”, señalan habitantes de la zona, quienes mantienen la esperanza en que las instituciones municipales y estatales puedan intervenir.
Surgen más interrogantes que requieren investigación profunda: ¿quién es el propietario de la gasolinera que permite estos encuentros? ¿Existe una cuota para permitir estas “reuniones ilegales”? ¿Cuál es la normativa municipal ante este caso? ¿Qué tan insensibles pueden llegar a ser estos motociclistas? Las respuestas, afirman los denunciantes, deben conocerse para frenar lo que consideran un agravio social normalizado y en expansión. La investigación continuará en próximas entregas.
DAM
